“El acceso al agua
para consumo en la vía pública es un derecho básico que el Estado debe
garantizar”, explicó el concejal que preside la Comisión de Medio Ambiente y
agregó que “sobre todo en las temporadas de altas temperaturas, todos los
ciudadanos tienen que poder satisfacer su necesidad de mantenerse hidratados”.
Además, informaron
que la iniciativa busca incentivar y asegurar las condiciones para la práctica
de deportes y actividades al aire libre por parte de los vecinos, una de las
prioridades esenciales para el cuidado de la salud y el mejoramiento de la
calidad de vida.
El proyecto explica que la cantidad de
bebederos se reglamentará de acuerdo a las necesidades de cada espacio público
y de los usuarios, asimismo deben tener un sistema de provisión de agua a
demanda y no de modo permanente a fines de evitar su derroche. "Es
importante que los bebederos no obliguen a establecer contacto directo con la
boca para evitar la transmisión de enfermedades", agregó Crespo.
Y concluyó: "Se trata de una propuesta fundamental para
ir cada vez más hacia un modelo de ciudad inclusiva, saludable y amigable con
el medio ambiente".