Familiares y amigos de Nicolás Pérez Gatti, el joven que fue
baleado y murió el 5 de octubre pasado, organizaron un evento en el club de
fútbol 4 y 84 de La Plata, donde la víctima fatal jugó desde los 5 y hasta los
13 años. Colocaron una placa en uno de los travesaños de una de las canchas.
Informó Infocielo que allegados a Nicolás Pérez Gatti, el
joven que murió el 5 de octubre pasado luego de ser baleado por dos motochorros
en el barrio platense de Villa Elvira cuando trabajaba como repartidor de
pizzas, organizaron este domingo una serie de eventos en su memoria para
reclamar justicia.
Leonardo Pérez, el padre de Nicolás, en diálogo con
INFOCIELO, explicó que “ayer recordamos a mi hijo en el club Inter, en 4 y 84,
donde Nico jugó desde los 5 y hasta los 13 años”.
En el homenaje jugaron al fútbol en varios partidos que
comenzaron a las 11 y el más importante fue a las 14 cuando jugaron los de la
categoría 2000. La parte más emotiva fue cuando se descubrió una placa colocada
en uno de los travesaños de una de las canchas con la inscripción “Club Inter,
en memoria a Nicolás Pérez Gatti, arquero categoría 2000 – 2019”.
Los familiares de Nico agradecieron el acompañamiento y
reclamaron justicia, debido a que en la actualidad no hay detenidos por el
caso.
Leonardo contó que la fiscal y los abogados defensores
apelaron la excarcelación otorgada por la jueza de menores a los dos
aprehendidos de 16 y 17 años que tenía la causa.
Uno de los dos abogados que tiene la familia de Nicolás,
Cristian González, dijo que "consideramos al igual que la fiscalía que hay
elementos y méritos más que suficientes para el dictado de la prisión
preventiva de los dos menores".
Nicolás fue atacado cerca de las 22 del sábado 5 de octubre
cuando entregó el pedido de pizzas en una vivienda del barrio Jardín de La
Plata en 81 entre 116 y 117.
Tras recibir el pedido, la dueña de la casa escuchó un ruido
y al salir nuevamente se encontró con el joven tendido en el piso y con una
moto encima de su cuerpo. Había recibido un disparo de una pistola 9 milímetros
en el cuello. Lo llevaron al Hospital San Martín pero no pudieron salvarle la
vida.