Los vecinos no salen de su asombro por los problemas que se
presentan con los caños de agua. Después de realizar varios reclamos se volvieron
a quejar porque las roturas no son reparadas por la empresa.
En 81 entre 9 y 10, un manantial de agua nace en una vereda
y decanta en el cordón para tomar rumbo a Barrio Monasterio. Contó Verónica
Zapata, que “tengo una pérdida de agua en la entrada de mi casa desde hace más
de un mes. Hicimos el reclamo a ABSA y todavía seguimos esperando”.
Los plazos para que empleados de la empresa lleguen hasta el
lugar no están establecidos. Puede que continúe con varios meses de demoras o que
lo resuelvan en pocas horas. Los vecinos al respecto no tienen dónde consultar.
No saben a qué altura de la solución está su reclamo y remarcan que son atendidos
por una computadora.