En la plaza de Skate enclavada en pleno corazón del Barrio
Jardín, un grupo de vecinos se dispuso en alegrar el espacio público plantando
distinta variedad de plantas, pero se encontraron con la novedad de que
empezaron a faltar.
Fue así que se organizaron para dar con el paradero del
ladrón o de la ladrona de plantas que por lo general actúa bajo la complicidad
de las sombras por la noche.
Tratando de apaciguar el robo reiterado de plantas y no
teniendo más remedio que trata de negociar con la persona que se las lleva, los
vecinos optaron en dejar un cartel para persuadir que no siga agrediendo con su
deliberado accionar.
A tono de verso y con una súplica le dejaron: “Si no te
gusta como va quedando la placita, haceme la segunda manita y no te robes la
plantitas”.