“Yo soy la dueña de la pérdida de agua”

 Una vecina que tiene una enorme pérdida de agua en la puerta de su casa no solamente tiene que lidiar con que no tiene presión, sino que los vecinos se vienen a quejar a su casa por el mismo problema.




María Petty, vive en 78 bis 5 y 6 y hace 5 meses que reitera casi a diario un reclamo por una pérdida de agua en la puerta de su domicilio que ya se ha convertido en un karma tanto para ella como para su familia.

No solamente María debe atender las situaciones de su hogar, “compro agua envasada para bañar a mi bebé” afirmó, sino que tiene que soportar los malos modos y caras de desaprobación de algunos vecinos que no entienden que la responsabilidad corre por parte de la empresa ABSA que no soluciona el problema.

Lo que comenzó con una pequeña pérdida ahora se ha convertido en un rio de agua que sale desde la vereda, corre hacia el cordón y como un río baja por 78 bis hacia 5, se acumula por la esquina y desde allí se dispersa con rumbo a 79 o la 80.

Como fue expresado, el malgasto del producto comenzó hace un año con una pequeña filtración, pero a la fecha es “es una catarata, no me dan solución en ABSA y tengo miles de llamados y nada” aclaró Mary.

“Tengo una gran pérdida de agua en la vereda hace un año. Llamo y llamo y jamás vinieron. Han llegado arreglar perdidas a medio metro de casa y jamás la mía. Yo no tengo presión, casi no hay agua en mi casa, encima de todo lo que pasamos, muchas veces, vino gente a quejarse con nosotros. Hola, soy la dueña de la pérdida de agua me tendría que presentar” cerró de manera irónica la docente.

El número de reclamo 2952202 es uno de los tantos que obtuvo Petti desde que comenzó con el derrotero de buscar soluciones. Lo compartió con un grupo de vecinos para que ellos también llamen para el arreglo, pero no han tenido suerte. Lo que sí está claro que ahora no solamente María tiene problemas de presión, sino que ya son varias las viviendas no solamente a su alrededor, sino que en varias manzanas que no tienen prácticamente agua en sus hogares.