19 de Febrero: Un barrio alumbrado por los vecinos

 


   Hace varios meses que los vecinos del ex barrio Storani, hace años que se llama 19 de febrero, en el triángulo formado por la Avenida 90, 117 y el diagonal 690, están cada vez peor con las luminarias que se van apagando y nadie las repone. Cada frentista que pierde la iluminación artificial colocada por el Estado la suplanta con una propia de su casa para no quedar a oscuras.

   Si algo les faltaba a los vecinos del Barrio forjado a la vera del Arroyo, que deben convivir con los tremendos olores que provienen del curso de agua, donde abundan roedores y otras alimañas, ahora se le suma la falta de luminarias.

  El barrio poblado con unas 200 viviendas, construidas a partir de la donación de tierras efectuadas al club “19 de Febrero” por el aquel entonces ministro de Acción Social del radicalismo, Conrado Storani, no solamente sufre el flagelo de la delincuencia sino que ahora los cacos se apoyan en las ventajas que les brinda la oscuridad.

La luz que ilumina la calle es de un particular



    En todo el perímetro donde se delimita el poblado barrio, con calles estrechas y maltrechas, se observan luminarias sin funcionar y en cada frente de las viviendas los vecinos han optado por colocar luces que no solamente iluminan las viviendas, sino que llegan hasta la calle.  

  Es coincidente, el relato de los frentistas en destacar que tanto los pedidos realizados a la Delegación como al 147 no brindan frutas y se sienten un tanto decepcionados con las promesas que se realizaron en el lugar previo a las elecciones que adelantaban mejoras de calles, alumbrado y seguridad.

   Hace dos meses, mientras que personal de Espacios Públicos de la comuna desarrolla tareas de podado en el lugar, una mala maniobra hizo que una pesada rama cayera sobre el tendido eléctrico y tensara los cables de alumbrado que provocaron la caída de un poste en Diagonal 690 bis 118 bis y 119.



   Eso provocó que tanto la luminaria allí ubicada como el equipo de alarma domiciliaria colocada por los vecinos terminen a centímetros del piso. En esa oportunidad, el poste con tensión, lámpara, parlantes y demás conexiones estuvo inclinado por más de 24 horas. Eso sí, Defensa Civil municipal se acercó al lugar, colocó cintas de precaución y se retiró rápidamente.

   Queda en evidencia ante la muestra fotográfica enviada a la redacción de NVE que son los vecinos los que están iluminando sus casas mientras que los postes de luz yacen inertes sin ninguna función.