Recrudecen los reclamos por limpieza y
recolección de basura en amplios sectores de Villa Elvira. En Villa Montoro un
basural tapa toda una esquina y no se puede circular.
Una vecina de la populosa barriada local denunció
que en 1 y 93 la gran cantidad de basura que se encuentra acumulada en la
esquina está tapando la circulación de personas y que en breve van a terminar
cortando la calle.
La
basura corta la circulación de personas por la vereda y corta gran parte de la
calle. Además el basural tiene unos diez metros de extensión por la gran
acumulación no solamente de basura sino que tiene el desperdicio de una gran
poda clandestina que se ha realizado en el lugar.
Es muy común en los últimos tiempos que los
vecinos realicen podas o la hagan realizar sin la correspondiente autorización
municipal dada la preocupante ausencia del estado en Villa Elvira y que luego
los frentistas se saquen de encima las ramas colocándolas en esquinas.
La misma operatoria ocurre con las obras en
domicilios particulares que en vez de arrojarlas a contenedores contratados para
tirar los deshechos son sacados a la vereda o pagan a carreros para que se la
lleven y éstos los terminan tirándolas en cualquier esquina de la localidad.
La basura es un problema crónico de la
periferia y Villa Elvira no dista en nada a lo que ocurre en varios lugares de
la ciudad. La más sencilla para los funcionarios es deslindar la
responsabilidad echándoles la culpa a los vecinos de formar basurales.
Pero a la larga, los grandes y millonarios
convenios entre el Estado con las empresas de basura, votados por el
oficialismo y refrendados por sonrientes opositores que levantan la mano más
rápido que el hombre del rifle bajaba un indio, terminan abarcando el circuito
histórico de la ciudad, las grandes concentraciones de casas en las
localidades, y brindando un servicio precario en las zonas más alejadas,
ocasionando generalmente los basurales en las esquinas, algo que en Villa
Elvira resulta muy normal. Algo impensado en City Bell o zonas de Country’s
donde suelen vivir los altos funcionarios.
En amplios sectores de la localidad la
recolección es más espaciada que los aumentos de sueldo. En Villa Alba por
ejemplo la recolección se realiza una vez por semana de manera sorpresiva para
los vecinos que no saben por qué calle pasarán ni cuándo. Contaron a NVE que le
pagan a los carreros para que se lleven la basura, por supuesto, la misma termina
siendo basural en otro barrios.
En Montoro, en la zona más cercana a la
avenida 13 en el barrio de club Floresta, hay sectores donde la recolección se
hace por una sola calle, dejando manzanas sin recolección, lo que provoca que
los vecinos produzcan basurales en las esquinas y en muchos casos son prendidos
fuego. Provocando un gran daño ambiental y poniendo en riesgo la salud de las
personas.
Estos son algunos de los problemas que surgen
en el amplio espectro de la localidad y que el garrismo no ha podido solucionar
en los 4 años que lleva de gestión, aunque le han permitido ganar en la última
elección con una amplia aceptación del vecino de Villa Elvira.
Si bien la cara visible hoy en la administración es de Carlos Vaccaro, vecino de City Bell, pero con trabajo desarrollado en la Unidad Operativa Municipal de Montoro, la gestión viene haciendo sapo en el tema basurales.
El
reclamo del vecino y el descontento por la gran cantidad de basurales que se
han formado en la localidad es notorio. Más allá del fogoneo político de
aquellos enfrentados a la conducción local o de muchos punteros que hoy se
ponen el traje de “yo no fui” y salen a cuestionar a la administración, cuando
hace algunos meses se movilizaron para operar la victoria de Julio Garro en
Villa Elvira, el problema de los deshechos en Villa Elvira es una cuestión central, más
allá de la trama conyuntural que hoy se lleva la opinión pública que es la
Pandemia del Covid 19.