Debido a los reiterados reclamos de los vecinos respecto de la calidad del agua a la que acceden en sus hogares, el concejal por el partido GEN, Gastón Crespo, solicitó que se realice un "análisis físico, químico y bacteriológico en toda la región".
Al respecto, señaló “según un relevamiento de más de 500 denuncias, el 36% de los reclamos se refieren a la poca presión y el 16% a la presencia de sedimentos o agua no potable”.
“Numerosas localidades platenses vienen informando que reciben aguas turbias, con sedimentos e incluso con larvas. Los barrios más afectados son Gonnet, Villa Castells y algunas zonas de Santa Ana, Melchor Romero, Parque Saavedra y San Carlos”, afirmó el concejal.
Y prosiguió: “Necesitamos de forma urgente que se realice un relevamiento detallado del agua que están consumiendo los vecinos, el mismo debe estar a cargo de la UNLP y de organismos especializados en la materia”.
El pedido presentado por Crespo refiere que la baja calidad del agua para uso residencial incide directamente en la salud y el bienestar humano, encontrándose entre las causas más frecuentes de enfermedades, sobre todo en niños y adolescentes.
Por su parte, la presión en la red de distribución también es un factor que se relaciona directamente con la salubridad ya que, cuando se reduce el caudal y luego retoma el valor habitual, el impulso del agua arrastra y reactiva sedimentos que absorben los contaminantes circundantes.
“Esta mala calidad del producto obliga a los vecinos a abastecerse de agua por su cuenta comprando bidones, lo que implica un gasto innecesario ya que también están obligados a pagar las elevadas boletas de ABSA por un servicio que no presta”, agregó el edil del GEN.
Y concluyó: “Es necesario aplicar los controles y exigencias correspondientes, por lo cual lo primero que requerimos es información completa para conocer la situación actual”.