Comentaron que no se harán grandes cambios en la Delegación salvo que prime la rosca política. Luis Barbier se saca chispas con Ganduglia y Lugli, mientras el concejal electo, Federico Molla va ganando terreno dentro del oficialismo y crece en armado político local.
Federico Molla Concejal Electo |
El conformismo que tiene el intendente,
Julio Garro, respecto al resultado en la última elección que le permitió ganar
en el casco de Villa Elvira y emparejar la votación desde la 90 hasta Parque
Sicardi, logrando acortar puntos con el Frente de Todos para perder por no
muchos votos, lo tiene tan feliz que no se piensan grandes cambios para la
región, salvo darle un lugar de gestión importante al sector de concejal Fabian
Lugli.
El responsable político de Cambiemos en
Villa Elvira es el ex kirchenista, actual secretario de Obras y Servicios
Públicos de la Municipalidad, Luis Barbier que es secundado por su yerno, Emanuel Otero, ex
militante de la Cámpora devenido en macrista, que cumple funciones como sub
secretario en la cartera que administra “Luiggi” y es está casado con Lucia
Barbier, hermana de su jefe y la cual ostenta un alto cargo en PAMI.
Un escalón por debajo, hasta el momento, aparece
Federico Molla ex administrador comunal y concejal electo por Juntos por el
Cambio, que después de la última elección se ganó el reconocimiento de
conocidos y extraños porque caminó la región de punta a punta, por lo que ya ha sumado muchos militantes tras su única figura.
Se rumorea en los pasillos de la Municipalidad que el
actual secretario de Seguridad Municipal, Dario Ganduglia, también ha sacado
chapa de la elección realizada en Villa Elvira. Otros apuntan a la inserción local de la concejal Ileana Cid, que operó con grupos de Villa Elvira y Altos de San Lorenzo en la última elección.
Los conocedores de la trama
interna del oficialismo le dan un reconocimiento mayor al trabajo realizado por
el pichetista, Fabian Lugli, que convoco para trabajar en el "garrismo" a un
amplio aparato peronista con ascendencia en varios sectores populares que ya habían cumplido la función de Delegados y que trabajaron a la sombra con gran
efectividad.
Más allá de las especulaciones políticas y
mediáticas de las últimas horas, se sabe que el Intendente ya tiene definido su
nuevo gabinete que no tendría mayores retoques pero que pagaría con algunas
áreas los acuerdos previos a las elecciones.
Por lo pronto, Julio Garro, como es su
costumbre ha pedido a cada uno de sus funcionarios, incluye también a los
delegados, sus renuncias para poder decir con tranquilidad los movimientos a
seguir de cara a la reasunción el 10 de diciembre.
“Julio ya tiene definido para su gabinete y es
muy probable que pague con direcciones o delegaciones algunos acuerdos que le
han resultado muy favorables” comentaron allegados en los pasillos del Municipio.
Con lo que respecta a Villa Elvira, el
actual administrador comunal, Guillermo Ferlín, quien para muchos no tuvo una
buena gestión y que su paso por las oficinas de 7 y 82 estuvo signada por varios
escándalos con cooperativistas y punteros, seguirá en su cargo y es uno de los que se golpea el pecho, junto a su hermano, por la elección en Villa Elvira.
Para algunos resulta muy descabellado pensar que Garro le
recortaría espacios a Barbier con lo que respecta a Villa Elvira, dada cuenta de su afinidad y entendimiento en
todo lo que tiene que ver con la obra pública, lo que sí está claro, aunque falta
confirmación oficial, es que Planeamiento saldrá de la órbita de la secretaría
que administra actualmente.
Todo está hablado entre Julio y Luis, dicen los más
cercanos al hombre fuerte de Villa Elvira, pero al parecer desconocen de los
movimientos que vienen desarrollando el “luglismo” en la localidad que apunta a
fortalecerse en un nuevo paradigma de la peronización de la gestión y para lo
cual el sector de Miguel Picheto, representado en la figura de Fabian Lugli, se
siente más que preparado para discutir posicionamientos regionales.