97 entre 6 y 7: El drama de vivir en una calle olvidada


   La demora en la reparación de la 96 que estuvo casi más de un año intransitable hizo que las calles paralelas fueron utilizadas para el paso del tránsito y quedaron prácticamente inutilizables.


   Es el caso de la 97 entre 6 y 7, donde los vecinos se han autoconvocado para hacer notar la situación que viven a diario. No encontaron respuestas q sus reclamos en el Municipio y mucho menos en la Delegación, al menos para trabajos menores de mantenimiento urbano.
   La 96, existen muchos vecinos que no la conocen, es una calle que cruza de punta a punta Villa Elvira atravesando los barrios de Villa Alba y Villa Montoro, arrancando en 122 y finalizando en avenida 7, lo que la hace altamente transitable.
   Cuando el deterioro de los pozos y el hundimiento de la calzada la convirtió por mucho tiempo en zona devastada, todo tipo de movilidad, arrancando por colectivos o camiones, terminaron utilizando las calles laterales provocando roturas irreparables que no fueron solucionadas luego de la remodelación de la 96.
   De este modo, una de las vías elegidas para salir a la avenida 7 fue la 97 que terminó hundida, con baches enormes y lamentablemente olvidados. Además de intransitable el zanjeo, iluminación y limpieza, son parte de su demanda.  
   Gustavo Soria, frentista de la cuadra informó que “cuando llueve tenemos que transitar si o si con botas, el barro es terrible pero no solamente el tiempo que llueve sino que se extiende dos semanas”
  En ese sentido, se puede observar que la calzada está hundida, con baches enormes, y además el deshecho de la limpieza de zanjas se encuentra sobre la calle provocando que el agua acumulada no drene hacia el cauce sino que quede a modo de pileta sobre la arteria.
   Partiendo del trabajo mal realizado o incompleto por no haber retirado el producto de la canalización, las zanjas tienen agua estancada lo que hace que también sea un riego para la salud. Es importante consignar que es un tema particular zona de Montoro donde las canalizaciones, drenajes, cruces de calles, el escurrimiento en general son un gran inconveniente del lugar.
    Por tal caso, Soria comentó que “por acá pasaron muchos autos y camiones con el problema que tenía la 96 y nunca la arreglaron, si bien antes estaba fea se podía circular, ahora los baches son enormes, para graficarlos con aquellos que no conocen podemos decir que está para que vivan gente”.
   Por último, otro de los grandes inconvenientes que sufren los vecinos de la cuadra es la falta de luminarias. Contaron que a medida que se fueron rompiendo no fueron suplantadas logrando que en un tiempo la calle termine siendo “una boca de lobo” y que provoque temor entre los frentistas a la hora de salir de sus casas por la noche.