Veredas con descuento para el vecino del casco platense: "O es pa' todos la cobija, o es pa' todos el invierno"
En un emocionado
discurso, Julio Garro, anunció que “desde el primer día nos propusimos
devolverle el brillo a nuestra ciudad y ponerla de pie después de décadas de
abandono” y resaltó el programa ofrecido principalmente a los habitantes de 1 y
19 desde 44 hasta 60.
El programa es
coordinado principalmente por la APR, Agencia Platense de Recaudación en
conjunto con otras secretarías. Contempla otorgarles a los frentistas un
descuento de hasta un 20% en la compra de materiales en los corralones
participantes y un descuento de hasta un 50% en la Tasa por Servicios Urbanos
Municipales (SUM) hasta alcanzar el costo de la mano de obra, la cual se
estipulará de acuerdo a los metros cuadrados.
En el programa “Mi
Vereda” el vecino puede reconstruirla o reparar la vía pública que corresponde
al frentista. Es una buena experiencia y oportunidad para generar empleo,
apoyar la venta de los corralones y embellecer la ciudad.
La discordia nace en
ver desde dónde el Ejecutivo emplea la capacidad operativa y benéfica para
cierta parte de la ciudad que en definitiva por vivir dentro del casco
fundacional siempre corren con ventajas por sobre otros ciudadanos que terminan
siendo postergados. No es potestad del oficialismo, sino de todos los gobiernos
que hasta la fecha han forrado a Villa Elvira o Altos de San Lorenzo con el
mote del patio de atrás.
El programa en sí
es muy bueno porque le da la oportunidad al frentista de cuidar su vereda e incentiva
el mercado interno. Pero lo que no deja de entender el oficialismo que en
barrios donde las veredas existen a medias o no existen es donde más se hace
falta.
Para finalizar y
ante éste tipo de anuncios es importante cerrar el tema con una frase de Arturo
Jauretche: “Hasta que un día el paisano acabe con este infierno, y haciendo
suyo el gobierno, con solo esta ley se rija: o es pa' todos la cobija, o es pa'
todos el invierno”.