Publicó el diario El Día, que un caño roto se convirtió en
la pesadilla de una vecina de Villa Elvira que acudió a eldia.com para expresar
su descontento e indignación con la situación y para denunciar que pese a los
incesantes reclamos que ha hecho en los últimos dos años y medio la empresa
prestataria del vital recurso no lleva adelante las tareas de reparación que
exige.
“ABSA tiene un doble discurso. Es innegable. A mí me piden
que cuide el agua y que pague las boletas pero ellos no se ocupan de brindar un
servicio eficiente y de arreglar las averías para evitar el excesivo derroche”
sostiene Adriana Donnantuoni.
Indignada, la frentista, que tiene su vivienda en la zona de
7 y 85, denunció que cada vez que se acerca a ABSA, recibe la misma respuesta:
“el arreglo ya se hizo”. Pero, según precisó Donnantuoni la avería todavía
permanece en el frente de su domicilio y en unos meses más cumplirá los tres
años.
La pesadilla para esta vecina comenzó en el 2014 cuando
quiso parquizar su patio. En ese momento se dio cuenta que lo que ella pensaba
que era tierra era en realidad barro y piedras. Desde ese momento Donnantuoni
cuenta que empezó la lucha para lograr que se arregle el desperfecto, que según
analiza, además de generarle molestias personales, provoca un serio daño a la
sociedad.
“Hay un derroche innecesario que afecta a la comunidad y en
mi caso me deja sin presión de agua. Cuando llega el mediodía, poder bañarse o
cocinar es un lujo” comenta Donnantuoni que a la vez “pidió a la empresa que
ponga en marcha un plan de reparación urgente para que no se pierda más agua”.