El radicalismo buscaría separar las bancas indignados por la falta de transparencia en la gestión. Un punto de inflexión se dio en la postura del Garro frente al problema de Mercado Central que aún operan las mafias
El frente Cambiemos a nivel local atraviesa una etapa de tensión y definiciones, con tres posturas aún en debate: los que pretenden dejar todo como está a pesar de las diferencias, buscar a través del diálogo un punto intermedio o romper directamente el frente y formar un bloque radical. A eso se suman las recientes declaraciones del intendente, quien afirmó: “Ellos tienen que solucionar sus problemas internos, entablar un diálogo y un acuerdo interno. Para luego venir más ordenados a continuar con este frente”.
En ese marco, luego de varias reuniones en la Junta Central, el radicalismo decidió llevar formalmente el martes los tres nombres de los integrantes de la mesa política que la semana pasada le propuso formar al intendente, Julio Garro, para discutir los temas de gestión: el presidente de la Junta, Marcelo Uriarte, el titular del bloque de concejales de Cambiemos, Juan José Cardozo, y la edil Florencia Rollié. Sin embargo, “no están definidos los integrantes”, contó la concejal.
Al respecto, Rollié detalló a Infoplatense que el “radicalismo viene diciendo hace tiempo que hay cosas con las que no estamos de acuerdo y tampoco tenemos la posibilidad de influir sobre las políticas porque no participamos de la gestión de forma directa” y confirmó la opción de la separación del bloque.
“Hay políticas bandera del radicalismo como la transparencia y no vemos que se esté trabajado en ese sentido”, criticó y dio como ejemplo la situación del mercado regional. En ese sentido, la concejal presentó hace un par de meses un proyecto en donde se proponía reducir en un 50 por ciento la tarifa de carga y descarga en el mercado regional para bajar un 6 por ciento el precio de frutas y verduras y terminar con la lógica mafiosa que éste arrastra, la “caja negra millonaria de recaudación que está montada desde la gestión anterior”.
Por último, Rollié confesó que otro de los puntos de conflicto es el tema de la información y la comunicación interna: “Los concejales nos enteramos muchas veces por los diarios de lo que está pasando en la gestión”.
Esta semana, Garro habría avivado las diferencias al expresar a un medio local lo “difícil que es hablar con actores de un partido con tantas líneas internas”. Asimismo, dijo: “Nosotros lo que no vamos a hacer es ser parte de una interna de la UCR, no nos corresponde y no nos vamos a meter”.
“Ellos tienen que solucionar sus problemas internos, entablar un diálogo y un acuerdo interno. Para luego venir más ordenados a continuar con este frente”, añadió aunque aclaró: “La gente quiere gestión, que las cosas funcionen, que haya seguridad, no leer en los diarios que un político se peleó con otro”.