Asesinado en el casco de la localidad

Un sujeto de nacionalidad peruana de 35 años fue asesinado en Villa Elvira, al ser atacado por la espalda. Recibió al menos dos puñaladas, que lo desangraron de inmediato. No hay detenidos 
Un individuo de nacionalidad peruana fue asesinado durante la madrugada de ayer de al menos dos puñaladas en Villa Elvira, en un sangriento episodio que aún no tiene detenidos ni sospechosos, establecieron fuentes policiales. 
La víctima, identificada como Luis Cesario, de 35 años, se encontraba alrededor de la 1.50 en 3 y 79, en la zona donde vivía antes de mudarse a 125 norte y 74 de Berisso. Por motivos que aún son motivo de investigación, el sujeto –vendedor de diarios- fue atacado por al menos otros dos, quienes lo habrían sorprendido de espalda y, sin mediar palabra, le habrían producido dos puñaladas, una de ellas en el pulmón, que le quitó la vida a los pocos minutos, luego de arrastrarse por varios metros.
Enterados de lo sucedido, oficiales de la comisaría Octava, al mando de Wilfredo Vilca, se dirigieron al lugar, y poco después lo hicieron los agentes del Gabinete de Homicidios de la DDI. Ellos, tras entrevistarse con los vecinos, averiguaron que la víctima era un exfrentista de la zona que tenía problemas con el alcohol y, en estado de ebriedad, solía volverse conflictivo, según se desprende del parte policial. 
Viejos problemas
Por aparentes problemas de viaja data, Cesario habría mantenido una discusión durante la madrugada, y después fue sorprendido y atacado por detrás, recibiendo una puñalada en la espalda, a la altura del pulmón derecho, y otra en el antebrazo, que sería de defensa.
Personal policial y médico que llegó a la escena del crimen lo descubrió tendido en el piso, sobre la vereda, en posición de decúbito ventral derecho y ya sin vida, encima de un enorme charco de sangre. De inmediato, mientras los peritos de la Policía Científica hacían su trabajo, comenzaron a recabar testimonios que puedan aportar datos de interés para la investigación y, a continuación, identificar a los responsables, aunque por el momento las pistas no son muchas.
Tomó intervención la comisaría Octava y la UFI número 4 de Fernando Cartasegna, quien caratuló el caso como “homicidio”. 
Lo atacaron por sorpresa 
Agustín es un vecino de la zona donde se cometió el crimen contra Luis Cesario, el canillita de 35 años asesinado de dos puñaladas, y escuchó el momento en que mataron al sujeto, de nacionalidad peruana. 
“Estaba durmiendo porque era la 1.50. Escuché un pedido de auxilio, pero no me animé a salir a la calle porque tenía en casa a mi mujer y a mi beba de once meses. Ni siquiera levanté la persiana, ya que podían hacerme algo a mí o a mi familia”, le comentó ayer el hombre que vive en la esquina de 3 y 79 a Trama Urbana. 
Tras el pedido de ayuda, llamó al 911 y en diez minutos vino la Policía y, otros tantos minutos después, la ambulancia, cuyos médicos constataron el fallecimiento del sujeto. 
“Por lo que sé, y lo que decían los peritos de la Científica, (Cesario) fue atacado por la espalda, a media cuadra. Le dieron dos puñaladas: una en el pecho y otra en el antebrazo, ésta última defensiva”, dijo, y agregó que el canillita “caminó unos metros, se apoyó en mi auto, llegó hasta la esquina y cayó en la vereda. Después se arrastró un poco, dejando sangre por todos lados. Por lo que comentaban los peritos, pudo haber muerto desangrado o asfixiado” por la sangre. 
Por último, dijo que alrededor de las “tres vinieron sus familiares, tengo entendido que su hija y su señora, y lo reconocieron. Lo que puedo decir es que no le robaron nada, ni tampoco él venía de robar. Lo atacaron por la espalda y de sorpresa”. 
A su vez, otra frentista le dijo a este medio que el barrio “es un despelote y hay muchas peleas” y “a la mañana se encuentra cualquier cosa”.