Fuente Diario Hoy - Dos cacos de 19 y 24 años abordaron al empleado de una sodería local en 3 bis y 80. Le sacaron plata y escaparon. Pero se encontraron con policías en 19 y 80 y cayeron en 13 y 98. Estaban armados con un revólver calibre 22
Dos maleantes armados que asaltaron a un distribuidor de sodas en 3 bis y 80, protagonizaron una extensa persecución por las calles de la ciudad, que se inició en 19 y 80 y culminó con su aprehensión en la intersección de 13 y 98, informaron fuentes policiales.
La violencia avanza en La Plata y en la región. Entretanto, las autoridades dan muestras de haber sido sobrepasadas por el violento accionar de los delincuentes y están lejos de encontrar soluciones a tan preocupante problema.
Esta vez el hecho ocurrió en la tarde de ayer, alrededor de las 15, cuando dos violentos asaltantes armados con un revólver calibre 22 abordaron al comerciante Juan José Alberti, de 35 años, en la esquina de 3 bis y 80. Los ladrones, quienes se movilizaban en una Honda Wave de color negro, amenazaron al sodero y huyeron tras apoderarse de dinero y algunas pertenencias de su víctima.
Tras el hecho, el empleado de la sodería “El Progreso” se comunicó de inmediato con el 911 y denunció lo sucedido. Poco después, avisados por la llamada del damnificado, efectivos del Gabinete de Narcocriminalidad de la DDI y del Comando de Patrulla Comunitaria que patrullaban la zona, coordinaron un rápido operativo de rastrillaje y dieron con los sospechosos en 19 y 80.
Alertados de la presencia policial, los dos delincuentes aceleraron con el objetivo de escapar de los agentes e iniciaron una persecución que se extendió por más de 20 cuadras y concluyó en 13 y 98, donde los malvivientes fueron rodeados por varios patrulleros policiales y se vieron obligados a rendirse y entregarse a los oficiales.
Los cacos, de 19 y 24 años, fueron apresados por los efectivos, quienes de inmediato los pusieron a disposición de la Justicia. El fiscal del caso, Marcelo Romero, a cargo de la UFI 4, imputó a ambos acusados por el delito de “tentativa de robo calificado, por haber sido cometido en poblado y en banda”.
Fuentes policiales añadieron, además, que tras las detenciones se recuperó un revólver calibre 22 en posesión de los maleantes, el cual, se presume, sería el que utilizaron para amedrentar y amenazar a Alberti. En tanto que también fue secuestrado el ciclomotor en el que se movilizaban los delincuentes, una Honda Wave sin patente colocada.