Eran poco más de las 7 de la mañana cuando la odontóloga Lilian Bornemann llegó a su consultorio, en Villa Elvira, y apenas si pudo creer lo que sus ojos veían: la puertas estaban barreteadas y desde afuera alcanzaba a verse todo revuelto. Poco después, cuando entró al lugar con la Policía, comprobó que los ladrones se habían llevado una importante cantidad de instrumental y otras pertenencias.
Según pudo saber este medio, todo pasó en el centro odontológico ubicado en la calle 72 entre 2 y 3. Allí, un grupo de desconocidos provocó considerables daños y causó a las víctimas un perjuicio económico cercano a los 10 mil pesos, entre lo que robaron y lo que rompieron.
"Actuaron con una impunidad bárbara", opinó Bornemann, quien descubrió el robo cuando llegó a trabajar como todas las mañanas. "No me animé a entrar y llamé al 911, por si había alguien adentro", indicó la mujer.
Para ingresar al lugar los ladrones utilizaron una maza y un cortafierro con lo que rompieron las dos puertas principales del centro odontológico.
HASTA LAS FICHAS
De acuerdo a lo que comentó la víctima, los ladrones, tras provocar "un desorden total", huyeron con instrumental sin uso, cajas con agujas descartables, modelos y otros materiales utilizados en la labor cotidiana. "No dejaron nada: se llevaron hasta los talonarios y las fichas odontológicas", agregó un testigo.
Por tal motivo, la profesional aseguró que ayer no pudo trabajar y se lamentó porque, aseguró, "todavía no sé cuándo voy a poder hacerlo".
La mujer realizó la denuncia y poco después personal de Policía Científica realizó en el lugar los peritajes de rigor. "Se llevaron muestras de una huella que encontraron en la puerta", indicó la víctima.
A pesar de que se presume que el saqueo tuvo lugar hacia las 6 de la mañana, los damnificados aseguraron que, por lo que ellos sabían, ningún vecino había visto lo que ocurría.
Según pudo saber este medio, todo pasó en el centro odontológico ubicado en la calle 72 entre 2 y 3. Allí, un grupo de desconocidos provocó considerables daños y causó a las víctimas un perjuicio económico cercano a los 10 mil pesos, entre lo que robaron y lo que rompieron.
"Actuaron con una impunidad bárbara", opinó Bornemann, quien descubrió el robo cuando llegó a trabajar como todas las mañanas. "No me animé a entrar y llamé al 911, por si había alguien adentro", indicó la mujer.
Para ingresar al lugar los ladrones utilizaron una maza y un cortafierro con lo que rompieron las dos puertas principales del centro odontológico.
HASTA LAS FICHAS
De acuerdo a lo que comentó la víctima, los ladrones, tras provocar "un desorden total", huyeron con instrumental sin uso, cajas con agujas descartables, modelos y otros materiales utilizados en la labor cotidiana. "No dejaron nada: se llevaron hasta los talonarios y las fichas odontológicas", agregó un testigo.
Por tal motivo, la profesional aseguró que ayer no pudo trabajar y se lamentó porque, aseguró, "todavía no sé cuándo voy a poder hacerlo".
La mujer realizó la denuncia y poco después personal de Policía Científica realizó en el lugar los peritajes de rigor. "Se llevaron muestras de una huella que encontraron en la puerta", indicó la víctima.
A pesar de que se presume que el saqueo tuvo lugar hacia las 6 de la mañana, los damnificados aseguraron que, por lo que ellos sabían, ningún vecino había visto lo que ocurría.