Un joven de 27 años fue baleado ayer en un glúteo cuando intentó resistirse a un robo en un almacén de Villa Elvira, informaron fuentes policiales.
El violento episodio sucedió cerca de las 11 de la mañana en el comercio ubicado en 117 entre 73 y 74, cuando dos sujetos tocaron el timbre y como el encargado, identificado oficialmente como Juan Pablo Pratto, conocía a uno de los presuntos clientes, les permitió entrar.
Los que ingresaron al polirrubro aprovecharon que el comerciante se encontraba solo con un sobrinito de 8 años y uno sacó un arma de fuego y explicó que se trataba de un asalto.
Iris Barría, de 41 años, la dueña del negocio y tía de Juan Pablo, le explicó a Trama Urbana que “al parecer, como no conseguían la plata de la caja, uno de los delincuentes amenazó con matar al nene”.
Luego de unos segundos de suma tensión, Pratto reaccionó y enfrentó a los ladrones. “No sé bien cómo ocurrió. Pero mi sobrino agarró al nene y en eso el chorro disparó”, explicó Iris.
Lo cierto es que los malvivientes le pegaron un tiro en el glúteo a Juan Carlos y vaciaron la caja registradora. Enseguida, como la detonación llamó la atención de varios vecinos, los cacos escaparon corriendo.
Barría relato que “por suerte al nene no le pasó nada”. Un allegado alertó al servicio de emergencias 911 y en minutos llegaron al lugar efectivos de la comisaría Villa Ponsati.
Los uniformados convocaron una ambulancia y Juan Carlos fue derivado de urgencia al Hospital San Martín, donde anoche permanecía internado pero fuera de peligro.
No le extrajeron la bala
Iris, la tía del damnificado, detalló que los médicos atendieron a Juan Carlos y que no le extrajeron la bala. “Nos dijeron que quedó alojada en un lugar que no va a molestar”, afirmó la mujer.
Ni bien se registró el ataque, los peritos de Policía Científica vallaron el lugar y buscaron huellas de los agresores y restos de proyectiles. “El negocio estuvo cerrado hasta cerca de las cinco de la tarde, para que los investigadores hagan su tarea”, señaló Barría.
Cinco robos en 16 meses
La comerciante indicó que los hechos de inseguridad en el barrio son periódicos. “Abrimos el almacén hace un año y cuatro meses y ya nos robaron tres veces, y en dos ocasiones fueron tentativas”, afirmó la mujer. Respecto al dato de que Juan Carlos conocía a uno de los ladrones, Iris comentó que”me parece que vive a unas dos cuadras de acá, pero no estamos seguros”.
No obstante, ayer trascendió que Pratto permitió el acceso de los dos jóvenes por que al menos a uno lo conocía.
Uno de los pesquisas sostuvo que “es muy probable que los agresores hayan estado bajo los efectos de las drogas. No es común que un ladrón robe en un negocio en el que su dueño lo puede identificar”.
En el caso tomó intervención personal de la comisaría Decimosexta y la UFI n° 11 en turno, a cargo del fiscal Alvaro Garganta, quien caratuló el hecho como “robo calificado y tentativa de homicidio”.
El violento episodio sucedió cerca de las 11 de la mañana en el comercio ubicado en 117 entre 73 y 74, cuando dos sujetos tocaron el timbre y como el encargado, identificado oficialmente como Juan Pablo Pratto, conocía a uno de los presuntos clientes, les permitió entrar.
Los que ingresaron al polirrubro aprovecharon que el comerciante se encontraba solo con un sobrinito de 8 años y uno sacó un arma de fuego y explicó que se trataba de un asalto.
Iris Barría, de 41 años, la dueña del negocio y tía de Juan Pablo, le explicó a Trama Urbana que “al parecer, como no conseguían la plata de la caja, uno de los delincuentes amenazó con matar al nene”.
Luego de unos segundos de suma tensión, Pratto reaccionó y enfrentó a los ladrones. “No sé bien cómo ocurrió. Pero mi sobrino agarró al nene y en eso el chorro disparó”, explicó Iris.
Lo cierto es que los malvivientes le pegaron un tiro en el glúteo a Juan Carlos y vaciaron la caja registradora. Enseguida, como la detonación llamó la atención de varios vecinos, los cacos escaparon corriendo.
Barría relato que “por suerte al nene no le pasó nada”. Un allegado alertó al servicio de emergencias 911 y en minutos llegaron al lugar efectivos de la comisaría Villa Ponsati.
Los uniformados convocaron una ambulancia y Juan Carlos fue derivado de urgencia al Hospital San Martín, donde anoche permanecía internado pero fuera de peligro.
No le extrajeron la bala
Iris, la tía del damnificado, detalló que los médicos atendieron a Juan Carlos y que no le extrajeron la bala. “Nos dijeron que quedó alojada en un lugar que no va a molestar”, afirmó la mujer.
Ni bien se registró el ataque, los peritos de Policía Científica vallaron el lugar y buscaron huellas de los agresores y restos de proyectiles. “El negocio estuvo cerrado hasta cerca de las cinco de la tarde, para que los investigadores hagan su tarea”, señaló Barría.
Cinco robos en 16 meses
La comerciante indicó que los hechos de inseguridad en el barrio son periódicos. “Abrimos el almacén hace un año y cuatro meses y ya nos robaron tres veces, y en dos ocasiones fueron tentativas”, afirmó la mujer. Respecto al dato de que Juan Carlos conocía a uno de los ladrones, Iris comentó que”me parece que vive a unas dos cuadras de acá, pero no estamos seguros”.
No obstante, ayer trascendió que Pratto permitió el acceso de los dos jóvenes por que al menos a uno lo conocía.
Uno de los pesquisas sostuvo que “es muy probable que los agresores hayan estado bajo los efectos de las drogas. No es común que un ladrón robe en un negocio en el que su dueño lo puede identificar”.
En el caso tomó intervención personal de la comisaría Decimosexta y la UFI n° 11 en turno, a cargo del fiscal Alvaro Garganta, quien caratuló el hecho como “robo calificado y tentativa de homicidio”.