La Virgen de San Nicolás llegó ayer por primera vez a La Plata y fue venerada por centenares de fieles que participaron de una nutrida marcha que se desarrolló a lo largo de la avenida 7, desde 90 hasta 630, donde se encuentra la Planta Transmisora del ministerio de Seguridad bonaerense, donde en el 2007 se produjo el triple crimen de los policías.
Es la primera vez que la imagen peregrina sale de San Nicolás para visitar la Ciudad, donde permanecerá hasta el 25 de mayo. La visita fue motorizada por la parroquia Cristo Rey de Villa Elvira que será el epicentro de una serie de celebraciones que hoy continuarán con otra peregrinación que arrancará a las 17 de 7 y 630, de ahí seguirá hasta 610, luego tomará por 122 hasta 66. Desde allí se marchará hasta la avenida 7 para completar el recorrido en la parroquia de 9 y 81.
Ayer, en medio de oraciones y cantos de los fieles, la Virgen fue escoltada en primera línea por el grupo Halcón de la Policía, efectivos del área de Comunicaciones y familiares de Alejandro Vatalaro, Ricardo Torres Barboza y Pedro Díaz, los tres policías asesinados. Según explicaron los organizadores, "ante la realidad de una justicia terrenal lenta queremos apelar a la justicia divina", por eso la "virgen peregrina" permanecerá en ese lugar hasta hoy a las 17.
Una vez en la Planta, el sacerdote Rubén Marchione fue el encargado de realizar una misa en homenaje a las víctimas de la masacre. Oscar Díaz, hermano de una de las policías asesinados, señaló su satisfacción por la llegada de la Virgen: "Se cumplieron 43 meses del triple crimen y ante la realidad de una justicia terrenal lenta con prófugos que no se puede encontrar, recurrimos a la justicia celestial para que con intercesión de la Virgen se pueda encontrar a los culpables", aseguró Díaz.
El martes 24, a las 22,30, se iniciará la Vigilia Mariana con la Bendición del Agua, acompañada por la "Evangelización Musical del Padre Mario". El miércoles 25, a las 18, un espectáculo de fuegos artificiales dará cierre a la misa con que la feligresía local despedirá a la virgen que ganó particular notoriedad en el culto católico desde que el 25 de septiembre de 1983 apareció en la habitación de Gladys Quiroga de Motta, una vecina de San Nicolás.
Es la primera vez que la imagen peregrina sale de San Nicolás para visitar la Ciudad, donde permanecerá hasta el 25 de mayo. La visita fue motorizada por la parroquia Cristo Rey de Villa Elvira que será el epicentro de una serie de celebraciones que hoy continuarán con otra peregrinación que arrancará a las 17 de 7 y 630, de ahí seguirá hasta 610, luego tomará por 122 hasta 66. Desde allí se marchará hasta la avenida 7 para completar el recorrido en la parroquia de 9 y 81.
Ayer, en medio de oraciones y cantos de los fieles, la Virgen fue escoltada en primera línea por el grupo Halcón de la Policía, efectivos del área de Comunicaciones y familiares de Alejandro Vatalaro, Ricardo Torres Barboza y Pedro Díaz, los tres policías asesinados. Según explicaron los organizadores, "ante la realidad de una justicia terrenal lenta queremos apelar a la justicia divina", por eso la "virgen peregrina" permanecerá en ese lugar hasta hoy a las 17.
Una vez en la Planta, el sacerdote Rubén Marchione fue el encargado de realizar una misa en homenaje a las víctimas de la masacre. Oscar Díaz, hermano de una de las policías asesinados, señaló su satisfacción por la llegada de la Virgen: "Se cumplieron 43 meses del triple crimen y ante la realidad de una justicia terrenal lenta con prófugos que no se puede encontrar, recurrimos a la justicia celestial para que con intercesión de la Virgen se pueda encontrar a los culpables", aseguró Díaz.
El martes 24, a las 22,30, se iniciará la Vigilia Mariana con la Bendición del Agua, acompañada por la "Evangelización Musical del Padre Mario". El miércoles 25, a las 18, un espectáculo de fuegos artificiales dará cierre a la misa con que la feligresía local despedirá a la virgen que ganó particular notoriedad en el culto católico desde que el 25 de septiembre de 1983 apareció en la habitación de Gladys Quiroga de Motta, una vecina de San Nicolás.