Alarmados por los continuos hechos de inseguridad que se registran en el barrio, vecinos de Villa Elvira decidieron unirse y organizar "Corredores Solidarios Seguros", de los que participarán tanto el personal policial como los comerciantes, el personal de los establecimientos educativos y los propios vecinos.
La propuesta, impulsada por el trabajo de una ONG vecinal que elaboró un "mapa del delito" en base a la recopilación de denuncias e información sobre diferentes hechos delictivos que se produjeron en la zona durante los últimos años, prevé al menos cuatro corredores diferentes, que variarán su ubicación de acuerdo con el horario y el índice de peligrosidad que se le asignó a los distintos lugares del barrio.
"Los corredores apuntan a reforzar la prevención, que era algo en lo que hasta ahora no nos habíamos involucrado activamente los vecinos. Se está trabajando en conjunto con el personal policial para ultimar los detalles de la organización, pero es una iniciativa de la que participará toda la sociedad y que apunta a proteger principalmente aquellos caminos que recorre la gente, y especialmente los chicos para ir a las escuelas, plazas o clubes", explicó Nancy Tiburzi, una de las impulsoras de la idea.
Para los vecinos, la propuesta apunta también a compensar la poca presencia policial que, según señalaron, hay en esa zona de la Región. "La policía tiene la mejor voluntad pero no cuenta con los elementos, por eso queremos organizarnos para facilitar su tarea, porque hubo una explosión en el crecimiento de la población que no se acompañó con mejoras en la seguridad", indicó Hugo Malisani, otro de los vecinos involucrados en el proyecto.
Los corredores propuestos abarcarán, entre otros puntos, la zona de la calle 117, entre 80 y 96, donde los vecinos marcaron como espacio de mayor riesgo el puente situado en 117 entre 90 y 92, donde también falta iluminación. Además, habrá mayor vigilancia en la escuela de 82 y 116, donde los padres de los chicos vigilarán en las esquinas para comunicar al 911 cualquier situación anormal que detecten. La mayor atención en esos lugares estará entre las 6.30 y las 8.30 de la mañana.
También se implementará un corredor, en horas de la mañana y al atardecer, en la zona comprendida por las calles 90, 600, 115 y 7, para darle mayor protección a la comunidad argentino-paraguaya que reside en la zona. En horas de la noche en tanto, habrá refuerzo en la seguridad de la calle 610 hasta llegar a Arana y en la calle 629, desde calle 7 hacia 1.
Los vecinos esperan implementar el nuevo sistema en los próximos 15 días, para adelantarse a las mayores horas de oscuridad del invierno.
La propuesta, impulsada por el trabajo de una ONG vecinal que elaboró un "mapa del delito" en base a la recopilación de denuncias e información sobre diferentes hechos delictivos que se produjeron en la zona durante los últimos años, prevé al menos cuatro corredores diferentes, que variarán su ubicación de acuerdo con el horario y el índice de peligrosidad que se le asignó a los distintos lugares del barrio.
"Los corredores apuntan a reforzar la prevención, que era algo en lo que hasta ahora no nos habíamos involucrado activamente los vecinos. Se está trabajando en conjunto con el personal policial para ultimar los detalles de la organización, pero es una iniciativa de la que participará toda la sociedad y que apunta a proteger principalmente aquellos caminos que recorre la gente, y especialmente los chicos para ir a las escuelas, plazas o clubes", explicó Nancy Tiburzi, una de las impulsoras de la idea.
Para los vecinos, la propuesta apunta también a compensar la poca presencia policial que, según señalaron, hay en esa zona de la Región. "La policía tiene la mejor voluntad pero no cuenta con los elementos, por eso queremos organizarnos para facilitar su tarea, porque hubo una explosión en el crecimiento de la población que no se acompañó con mejoras en la seguridad", indicó Hugo Malisani, otro de los vecinos involucrados en el proyecto.
Los corredores propuestos abarcarán, entre otros puntos, la zona de la calle 117, entre 80 y 96, donde los vecinos marcaron como espacio de mayor riesgo el puente situado en 117 entre 90 y 92, donde también falta iluminación. Además, habrá mayor vigilancia en la escuela de 82 y 116, donde los padres de los chicos vigilarán en las esquinas para comunicar al 911 cualquier situación anormal que detecten. La mayor atención en esos lugares estará entre las 6.30 y las 8.30 de la mañana.
También se implementará un corredor, en horas de la mañana y al atardecer, en la zona comprendida por las calles 90, 600, 115 y 7, para darle mayor protección a la comunidad argentino-paraguaya que reside en la zona. En horas de la noche en tanto, habrá refuerzo en la seguridad de la calle 610 hasta llegar a Arana y en la calle 629, desde calle 7 hacia 1.
Los vecinos esperan implementar el nuevo sistema en los próximos 15 días, para adelantarse a las mayores horas de oscuridad del invierno.