Choferes y empresarios de la línea Este se quejaron por los piedrazos que reciben las unidades, al circular por un barrio de nuestra región. Hubo pasajeros lesionados y rotura de cristales. Los conductores también suelen ser víctimas de robos, tituló el diario Hoy
El simple hecho de completar el recorrido se convirtió en una tarea de riesgo para los choferes de una línea de colectivos, cuyas unidades son literalmente apedreadas cuando circulan por un barrio ubicado en la localidad platense de Villa Elvira. El hecho no es nuevo, pero según indicaron los empresarios del sector “se agravó durante las últimas semanas”.
El blanco de estas incomprensibles agresiones son los internos de uno de los ramales de la línea Este que, al transitar por la zona de 122 y 600, son impactados con “todo tipo” de elementos contundentes. “Desde piedras hasta tuercas”, dijo uno de los empresarios al ser consultado por Hoy.
A raíz de estos ataques hubo pasajeros que resultaron lesionados y cristales que se astillaron. “Es una peligrosa situación que deberá revertirse en lo inmediato”, consideró el empresario y planteó el siguiente interrogante: “¿Qué pasaría si uno de esos proyectiles o los restos de un cristal impactaran en los ojos o el rostro de un chofer?”. La respuesta es tan simple como inquietante: se estaría ante el riesgo cierto, de lamentar un accidente con consecuencias impensadas.
“Ya hemos hablado con la Policía y han enviado patrulleros, lo que sucede es que cuando éstos se retiran reaparecen las agresiones”, comentó el empresario, y pidió más protección.
Tanto él como los choferes entienden que estos ataques son perpetrados por jóvenes o adolescentes, que “desprecian” la seguridad de los demás. Lo que pueden acreditar de modo inequívoco es que esta pesadilla comenzó hace aproximadamente un año, y se tornó más intensa durante los fines de semana.
LadronesEse no es el único problema que sufren, ni la única zona por la que transitan a merced de la inseguridad. Nada de eso, según apuntó el empresario -que pidió que su identidad permaneciera en reserva- distintos choferes de la misma línea han sufrido amenazas y hasta robos.
“Es increíble, pero hay quienes -con absoluta impunidad- paran los colectivos y amenazan a los choferes para que les entreguen el dinero o el teléfono celular”, dijo, y agregó: “Inclusive les han robado cadenitas de oro y otros objetos personales”.
En la empresa dijeron que estos episodios son consecuencia de “una sociedad enferma”, y agregaron que la preocupación va en aumento ya que conductores y pasajeros se encuentran en un estado de indefensión.
El empresario alertó que la solución sería cortar el servicio, “pero tenemos la obligación de darlo”. Está claro que una medida drástica terminaría perjudicando a los propios habitantes de aquellos barrios en los que se registran estos inconvenientes.
El simple hecho de completar el recorrido se convirtió en una tarea de riesgo para los choferes de una línea de colectivos, cuyas unidades son literalmente apedreadas cuando circulan por un barrio ubicado en la localidad platense de Villa Elvira. El hecho no es nuevo, pero según indicaron los empresarios del sector “se agravó durante las últimas semanas”.
El blanco de estas incomprensibles agresiones son los internos de uno de los ramales de la línea Este que, al transitar por la zona de 122 y 600, son impactados con “todo tipo” de elementos contundentes. “Desde piedras hasta tuercas”, dijo uno de los empresarios al ser consultado por Hoy.
A raíz de estos ataques hubo pasajeros que resultaron lesionados y cristales que se astillaron. “Es una peligrosa situación que deberá revertirse en lo inmediato”, consideró el empresario y planteó el siguiente interrogante: “¿Qué pasaría si uno de esos proyectiles o los restos de un cristal impactaran en los ojos o el rostro de un chofer?”. La respuesta es tan simple como inquietante: se estaría ante el riesgo cierto, de lamentar un accidente con consecuencias impensadas.
“Ya hemos hablado con la Policía y han enviado patrulleros, lo que sucede es que cuando éstos se retiran reaparecen las agresiones”, comentó el empresario, y pidió más protección.
Tanto él como los choferes entienden que estos ataques son perpetrados por jóvenes o adolescentes, que “desprecian” la seguridad de los demás. Lo que pueden acreditar de modo inequívoco es que esta pesadilla comenzó hace aproximadamente un año, y se tornó más intensa durante los fines de semana.
LadronesEse no es el único problema que sufren, ni la única zona por la que transitan a merced de la inseguridad. Nada de eso, según apuntó el empresario -que pidió que su identidad permaneciera en reserva- distintos choferes de la misma línea han sufrido amenazas y hasta robos.
“Es increíble, pero hay quienes -con absoluta impunidad- paran los colectivos y amenazan a los choferes para que les entreguen el dinero o el teléfono celular”, dijo, y agregó: “Inclusive les han robado cadenitas de oro y otros objetos personales”.
En la empresa dijeron que estos episodios son consecuencia de “una sociedad enferma”, y agregaron que la preocupación va en aumento ya que conductores y pasajeros se encuentran en un estado de indefensión.
El empresario alertó que la solución sería cortar el servicio, “pero tenemos la obligación de darlo”. Está claro que una medida drástica terminaría perjudicando a los propios habitantes de aquellos barrios en los que se registran estos inconvenientes.