Marcha por la Inseguridad

NOTICIAS DE VILLA ELVIRA ACOMPAÑA

No son solamente a la presidente, Cristina Kirchner, al gobernador, Daniel Scioli, o al intendente, Pablo Bruera, se le reclama por la inseguridad. No son ellos los que respondan por el pasado, sino que tienen que responder por el futuro. Un futuro sombrío y sin luces que a la postre será la metas de hijos y nietos que verán como los códigos morales y las Leyes fueron perdiendo su fuerza, porque en éste presente, nadie tuvo la voluntad de decir “Basta”.
La sociedad tiene la necesidad de pedir Paz, Seguridad y Justicia. Es el Estado quien la debe brindar para no estar ausente de los acontecimientos. Hoy el cargo, el puesto y la situación, hacen que la responsabilidad de enmendar los errores del pasado pase por sus manos. Es la sociedad en su conjunto que reclama acciones claras, justas y atinadas, para parar la violencia.
En dos meses empieza el “Operativo Sol” y la marcha del 27 de octubre será un simple recuerdo. En un año, los vecinos estarán reclamando seguridad, justicia social y un cambio en la política; manifestándose en las urnas. En diez años… dónde y como estaremos en diez años.
Los políticos son amigos de las estadísticas y ellas dicen que en La Plata crecieron los índices del delito. Es porque que algo no se hizo para evitar o prevenir que así suceda. Seguramente, lo único que se hizo fue hacer saltar el fusible de un cargo. Algo no se hizo. Algo no se hace. ¿La sociedad?. Escondida, con miedo, refugiada bajo siete llaves sin mirar para afuera.
Las autoridades deben demostrar por qué fueron elegidos y, los de carrera, mostrar por qué llegaron. Hoy ya no es momento de pedir. Es el día de demandar, obligar, exigir, por la seguridad de todos los vecinos, por la Libertad perdida.
Es por esa razón que Noticias de Villa Elvira, acompaña el reclamo vecinal del próximo 27 de octubre, a las 19 horas, en 6 y 50. A continuación, compartimos un poema, del libro “Poemas del Paisano” El “chato” Cervera, del platense por elección, Luis Da Silva.




Por Luis Da Silva, del Libre “Poemas de Paisano”
“PARA DECIRLES BASTA”


¡Basta!

¡He dicho basta!

un basta enorme, sonoro, bestial,

un basta litúrgico

“si usted quiere”

Es que estoy de ajeno por dentro,

como en una casa grande,

como en una pena grande,

como en una palabra inmensa.

Y he dicho ¡basta!.

Basta hasta los tuétanos.

Un basta sin lágrimas,

sin sermones ni lamentos.

Un basta glorioso, magnífico,

que no espera respuestas.

Un basta que intenta

organizar la estampida.

Es que aquí no se trata

de tontos balbuceos,

ni de zurdos ni de fachos.


De lo que se trata

es de quebrar el “Hambre”,

el hambre criminal y cotidiano,

ese que aturde y desvela,

que torna demencial las mañanas.

Angustia mayúscula.

Dolor grande.


Desmesura del alma.

Aquí me planto diciendo ¡basta!

haciendo ¡basta!

Súmese paisano.

Mire que el dolor se ha vuelto polen,

y anda germinando ingenuidades

e infancias necesarias.


Mire paisano

que no se trata de discursos,

ni de gruesas virtudes

mentidas a los gritos.

Sino de dispararles un ¡basta! grosero,

bien guaso “si usted quiere”.



Un basta que se escuche en las aulas,

en los claustros solemnes,

en los cuarteles patrios,

en las villas y en los bares.

¡Que se arme entonces!

Que se arme el ¡basta!

hasta los dientes.

Que estalle en los tornos,

en las fábricas febriles,

en los duendes de los campos,

y en las manos solitarias.

Que estalle el ¡basta!

Que se haga macho,

que no se aturda con el vino.

Que se pare sobre su sangre.

De pié. Bien de pié.

¡Como un quebracho en pié!

Y le escupa un “¡basta gargajo!”

al dueño de los panes.

Venga paisano.


No tenga miedo.

Sáquelo todo afuera.

Emigre como los pájaros.

Sáquele la funda al silencio.

Mire que el ¡basta! lo lleva dentro,

y adentro no pasa nada:

tan solo se muere despacio.

Entonces paisano,

si usted lo quiere,

habrá llegado el momento

de gritarles ¡basta!,

pero con todas las ganas,

y juntarse ensemillados de conciencia,

para sembrar a lo bestia

surco por surco si fuera necesario.


Y no será fácil paisano.

Habrá mil disgustos

y enormidad de desvelos,

dificultad y premura,

zozobra y extravíos.


Pero para ese entonces paisano,

seremos multitud de ¡basta!

recorriendo la Patria.

No será necesario

enumerar insolencias,

o contarle a los niños

las imprudencias de sus padres.

Se armará la vida desde la simiente.

Sueño libertario.

Argumento germinal,

que habrá nacido, paisano,

en una tarde ceniza,

cuando los sueños se hicieron tumulto.

Y el coraje.

El coraje gritó: ¡BASTA!.